Los precios cobrados por los abogados, llamados honorarios, no están predeterminados. Esto significa que los precios son libremente determinados por cada profesional. Por lo tanto, naturalmente, usted debe celebrar un acuerdo con su abogado con respecto a los honorarios a pagar.
En nuestro caso, establecemos una política de tarifas que tiene privilegios sobre el sistema de precios fijos. En estos casos, el Cliente conoce de antemano el importe total de las tasas que tiene que pagar, que están previamente definidas.
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Además de estos, y de acuerdo con nuestro Cliente, se puede establecer un precio fijo a pagar por otros servicios.
Si no está de acuerdo con una cantidad fija con su abogado, debe celebrar un acuerdo con él que establezca los criterios y parámetros que seguirán los ajustes de honorarios, así como las condiciones de pago y cualquier otro dato relevante.
Los mejores profesionales envían periódicamente a sus clientes informes con una descripción de los servicios prestados y el importe correspondiente a pagar.